LOS DAÑOS A LA SALUD CAUSADOS POR YANACOCHA
Jorge Pereyra
Jorge Pereyra
Los daños a la salud que causa la
minería de tajo abierto tienen varias causales. En este artículo vamos a hacer
énfasis en los daños y factores más frecuentes.
Estos daños tienen que ver con los
factores contaminantes (polvo con metales pesados y ácido cianhídrico); el
tiempo en horas de exposición a esos factores; y además en la cantidad o
volumen de esos factores sobre las personas.
Damos cuenta de estos daños a la
salud, porque las autoridades sanitarias y ambientales ocultan deliberadamente
esta realidad a nuestra población bajo presión del gobierno minero-militar,
cómplice y traidor de Ollanta Humala, al cual sólo le interesa exportar piedras
a cualquier costa sin importarle el daño ambiental y humano.
EL POLVO
En toda explotación minera a tajo
abierto, al estilo de Yanacocha, la población está expuesta al polvo
(silicosis) que flota o está suspendido en el aire de forma permanente. Este
polvo está lleno de metales pesados y sales minerales (plomo, zinc, cadmio,
arsénico, entre otros), que se liberan de las rocas al ser dinamitadas todos
los días.
Asimismo, el polvo se levanta en
tolvaneras propiciadas por los camiones y las maquinarias. Además, ese polvo
está “enriquecido” con ácido cianhídrico que se forma durante la evaporación de
la mezcla entre el agua y el cianuro de sodio que se usa durante el riego en
los patios de lixiviados.
Las 24 horas del día la población
está expuesta al polvo que no sólo afecta ojos, garganta o piel, sino que se
vincula también a otros procesos bronco-respiratorios que se ven afectados
indirectamente.
Las casas de Cajamarca tienen polvo
permanentemente y ello facilita la contaminación de alimentos, agua, ropa,
etcétera. No hay un solo espacio libre de polvo en toda la ciudad, y quienes
mayor recurrencia con daños a la salud presentan son las mujeres embarazadas,
los niños y adultos mayores.
Todo este polvo es transportado por
el viento hasta la ciudad de Cajamarca desde las partes altas (cabeceras de
cuenca) donde actúa Yanacocha y luego se deposita en toda la amplitud de
nuestro valle.
A ello habría que agregar, los miles
y miles de galones de combustible que queman las maquinarias de Yanacocha las
24 horas del día produciendo un volumen impresionante de dióxido de carbono.
En una palabra, actualmente
respiramos “basura”. Antes los asmáticos venían a Cajamarca a curarse por su
buen clima y limpia atmósfera, ahora los asmáticos se hacen en Cajamarca.
ENFERMEDADES MÁS FRECUENTES POR LA
CONTAMINACIÓN MINERA
Otros elementos importantes son la
concentración-cantidad del contaminante, y la temporalidad y tiempo (número de
días-horas al día), lo cual ocurre de manera diferenciada de acuerdo con la
época del año, siendo la más extrema en la época seca.
Absolutamente todas las familias
tienen por lo menos un integrante con una o más de las enfermedades que están
relacionadas con la extracción de minerales: padecimientos entre leves y graves
que se sufren en los ojos, piel, oídos, vías respiratorias, gastrointestinales
o de parto prematuro.
Se registran asimismo casos de partos
prematuros entre las mujeres de 16 a 40 años de edad.
En casi todas las familias, hay por
lo menos un integrante con los ojos rojos, irritados, llorosos, secos, con
ardor, comezón o con cuadros de conjuntivitis.
Las familias que se baña con agua
contaminada de manantiales presentan daños en la piel por irritación, aparición
de manchas, resequedad, agrietamiento, ámpulas, salpullido, ardor o comezón.
Últimamente, la Dirección de Salud de
Cajamarca ha reportado que una gran cantidad de la población presenta una o más
enfermedades de garganta como dolor, irritación, ronquera, inflamación o
anginas. Y también ha señalado que un gran número de personas presentan
recurrentemente uno o más síntomas o malestares respiratorios, como gripe, tos,
bronquitis, asma o pulmonía.
Por otra parte, también se registran
casos de caída o resequedad de cabello y se presentan distintos síntomas en los
oídos, como dolor, disminución auditiva o pérdida auditiva, infección, comezón
y zumbidos.
Asimismo, por el consumo de aguas
contaminadas con metales pesados, la población cajamarquina padece
frecuentemente de trastornos gastrointestinales como nauseas, diarreas y
parasitosis. No olvidemos tampoco que Cajamarca exhibe el triste récord de
ocupar el primer lugar a nivel nacional en casos de cáncer estomacal.
A ello se suma igualmente que algunos
sectores de nuestra población padecen enfermedades nerviosas, como dolor de
cabeza, agotamiento, somnolencia e irritabilidad y desánimo.
El ruido permanente de la operación
minera, en poblaciones cercanas, genera alteraciones de sueño y problemas de
pérdida auditiva que irán aumentando en el mediano y largo plazos.
Muchos de los trabajadores mineros
sufren de problemas óseos y musculares, prevaleciendo el dolor de huesos, de
cintura o de espalda.
En algunas mujeres y hombres de
distintas edades, sus cuerpos manifiestan presencia de metales pesados en la
sangre debido a que tienen las uñas amarillas y descarapeladas, y pigmentación
de piel con manchas negras, blancas o rojizas.
Constantemente los trabajadores que
están más cercanos a los tajos y patios de lixiviados han presentado síntomas
de intoxicación, como dolores agudos de cabeza, náuseas e incluso
desvanecimientos y desmayos. Estos casos se presentan tanto adentro de las
instalaciones mineras como al llegar a sus casas.
En pocas palabras,
Yanacocha representa para los cajamarquinos una “muerte lenta”.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario