Defensor del Pueblo es acusado
de coludirse para enriquecerse ilícitamente con compra de inmueble.
El ingeniero Víctor Canani acusa a Walter Gutiérrez de haber comprado dolosamente un inmueble que se tenía acordado de no venderse por encontrarse hipotecado. El flamante defensor del pueblo, Walter Gutiérrez, es acusado de enriquecerse ilícitamente con la adquisición de un inmueble que se encontraba hipotecado. El ingeniero Víctor Canani Larco denunció que el abogado a cargo de la Defensoría se hizo dueño de una propiedad a un monto ínfimo en comparación a su valor real, tras maniobras judiciales. “Con solo 270 mil dólares, Walter Gutiérrez Camacho se hizo dueño de una propiedad que ha sido tasada en 2 millones 900 mil dólares por el Poder Judicial. Allí hay una utilidad, una ganancia ilícita en base a maniobras que ha incurrido el señor Gutiérrez en base de sus influencias dentro del Poder Judicial”, afirma Canani, en declaraciones recogidas por diario La República. La denuncia hizo eco luego de que el semanario "Hildebrandt en sus trece" recogiera el testimonio del ingeniero, quien lo acusa de comprar dolosamente el inmueble, prenda de una deuda. Además, Canani dice que el actual Defensor se niega a pagarle los 850,000 dólares que, en escritura pública, se comprometió a honrar. En el 2012, Víctor Canani le prestó a Fernando Bayona 500 mil dólares para que éste lo invirtiera en un proyecto minero. Bayona hipotecó, a favor del ingeniero, el inmueble ubicado en la Av. Salaverry 2691 (San Isidro). Como parte del acuerdo, se determinó que que la propiedad no sería vendida mientras la hipoteca siguiera en pie. De acuerdo al ingeniero de 78 años, Bayona nunca cumplió el pago. Ante ello Canani inició el proceso de remate del inmueble para recuperar su dinero. Es allí donde aparece Walter Gutiérrez, quien reclamó que el proceso lo perjudicaba directamente, dado que era el nuevo dueño del inmueble. “Sin que supiéramos nada, en junio del 2013 el señor Gutiérrez le compró la propiedad a Bayona al precio de 1 millón 490 mil dólares, de lo cual solo canceló 270 mil dólares. Según la escritura pública de la compra, Gutiérrez se comprometía a pagar 850 mil dólares al acreedor (Canani) para evitar el remate, pero no lo hizo. Por el contrario, empezó a obstruir el proceso sin pagar ni un centavo hasta la fecha”, explica Luis Chacaliaza, abogado del ingeniero Canani. En una carta notarial enviada por Canani a las oficinas de Gutiérrez el 31 de agosto, el ingeniero sostiene sobre el actual defensor: “Su comportamiento, señor Walter Gutiérrez, en este proceso ha sido totalmente obstruccionista, hasta podría decirse delincuencial, por cuanto su intervención solo estaba sujetaba sujeta en cumplir el pago de los US$ 850.000,00 (…) consideramos que ese contrato de compra venta (entre Gutiérrez y Bayona) ha sido celebrado con evidente mala fe, solamente para proteger a los ejecutados y conseguir ambos ventajas económicas con el fin de enriquecerse ilícitamente”.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario