Verónika decide
morir
Marco Sipán
Cada vez tiene menos posibilidades de ser candidata en el 2021
El congreso del Frente Amplio (FA) generó muchas expectativas. Se pensó
en la consolidación del frente, la posibilidad de integrar a las fuerzas que
participaron en la campaña electoral e institucionalizar los comités que se
constituyeron en todo el país para apoyar la candidatura de Verónika Mendoza.
Pero eso no sucedió. Al haber pasado mucho tiempo desde las elecciones, la
emotividad de la gente entró en reflujo, y a eso se le sumó la ausencia de
Tierra y Libertad (TyL) en el Congreso. Algunas fuerzas celebraban esta
decisión, sin ser conscientes de que perdían a la única fuerza que contaba con
la inscripción, requisito obligatorio para los próximos procesos.
La renuncia de más de cien militantes a TyL y el lanzamiento de una
nueva organización política llamada Movimiento Nuevo Perú “por el trabajo, vida
digna y democracia”, que recolectará firmas por Verónika Mendoza es el ocaso
del FA. Hechos que hacen tambalear la futura candidatura de Verónika a la
presidencia; porque la deja condicionada a la recolocación de más de dos
millones de firmas para poder validar las 800,000 requeridas; además de
mantener locales activos y la instalación de alrededor de 60 comités que, como
sabemos, demandarán recursos económicos y una red nacional de operadores
políticos con los que el flamante partido no cuenta.
Las consideraciones para esta decisión son ingenuas. Se parte de la idea
que los múltiples comités de apoyo a la campaña de Verónika se convertirían
mecánicamente en espacios del nuevo partido. Lo cual no es tanto así, pues los
comités de apoyo locales nunca fueron homogéneos; en ellos participaron
diferentes agrupaciones, en el caso de algunas regiones hasta más de diez
organizaciones los conformaban. Organizaciones locales que compiten entre sí en
las elecciones para gobiernos locales y que requieren también de sus propias
inscripciones para su participación en dichos comicios. Siendo así las cosas,
lo que nos dice la lógica política es que estas organizaciones optarán por
canalizar sus fuerzas a la posibilidad más inmediata: gubernaturas, alcaldías y
regidurías en el proceso electoral 2018, en el que Verónika no tiene mucho que
ofrecer, sin organización inscripta.
En la constitución de este nuevo espacio político Verónika ha decidido
caminar sola y se ha alejado de Patria Roja, el PC-Unidad, Fuerza Social y CxC
(fuerzas que ahora recogen firmas por su propia cuenta). La expulsión de la
mitad de los fundadores de Sembrar y la adhesión de los disidentes de TyL al
Movimiento Nuevo Perú lo único que hacen es mostrar la inestabilidad de esta
organización. Las decisiones que Verónika viene tomando le están quitando la
posibilidad de presentarse en la arena política del 2021. Ella, o sus asesores
más cercanos no han sabido capitalizar el gran respaldo que obtuvieron en las elecciones
pasadas, lo cual puede pasarle una muy pesada factura.
El comentario ayuda presentar la Esperanza y hasta el OBJETIVO de las mafias y oportunistas... NUNCA HA SIDO FACIL para las fuerzas politicas del campo popular construir su partido o movimiento a nivel nacional...¿por qué? UNO porque no estan hipotecados a ricachos y mafias y DOS poque sus principales enemigos no esta en la DERECHA CAVERNICULA, esta en los pequeños grupos de las izquierdas que pululan marginalmente.... NO HAY IMPOSIBLES
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