García y Velásquez Quesquén eran “caseritos” de Odebrecht

Sergio Tejada, exPresidente de Megacomisión que investigó irregularidades del último gobierno aprista, dijo que en 2010 y 2011 García, acompañado de Velásquez Quesquén, sostuvo reuniones “recurrentes” con el representante de Odebrecht, Jorge Barata, y otros ejecutivos de la misma.

El segundo gobierno de Alan García le dedicó gran atención y tiempo al desarrollo de las negociaciones con los representantes de la empresa brasileña Odebrecht en el Perú, al punto que el mismo Mandatario y su entonces primer ministro, Javier Velásquez Quesquén, se reunieron muchas veces con ellos, en especial con Jorge Barata, director ejecutivo de la empresa en nuestro país.

El expresidente de la Megacomisión del Congreso que investigó las irregularidades del segundo gobierno de García, Sergio Tejada, dijo en Ideeleradio que tales reuniones eran recurrentes, lo que se confirma incluso con un simple chequeo de archivos donde siempre se identifica qué personas participan en reuniones con el Mandatario, un ministro u otro funcionario público.

EN CONFIANZA
Y allí se ve, por ejemplo, que el 11 de febrero del 2010 se reunieron solos Velásquez Quesquén y Jorge Barata, director Ejecutivo de Odebrecht en Perú. El tema de la conversación: el Proyecto Olmos.

También figuran muchas otras donde estuvieron ambos y funcionarios directivos de ProInversión, el Gobierno Regional de Lambayeque y del Proyecto Olmos.

Cabe señalar que dicho proyecto es de ingrata recordación para los campesinos lambayecanos, pues inspirado en sus reclamos de 80 años por agua para sus tierras sedientas, fue ejecutado irregularmente y finalmente los gobiernos de García y Alejandro Toledo prefirieron venderles decenas de miles de hectáreas con riego seguro a grandes consorcios del sector privado a precios muy por debajo de lo que invirtió el Estado peruano.

PASAJERO ESPECIAL
Sobre el interés y la prolijidad que dedicó Alan García a sus relaciones con Jorge Barata, dijo Tejada que ello queda remarcado por las reuniones frecuentes que sostuvieron y porque lo invitó varias veces a acompañarlo en el avión presidencial, incluso para inspeccionar trabajos de diversas obras en el interior del país, aunque ahora niegue importancia a esas excursiones.

Volviendo a las reuniones en Palacio, y sobre todo las de funcionarios y directivos del Estado peruano y de la firma Odebrecht, Tejada dijo que aquellas pudieron crear el clima para la organización de coimas.

Señaló que puede suponerse que allí no pasó nada, pero nadie pareció demostrar temor de que los altos directivos de Odebrecht pudieran quejarse por ejemplo ante Alan García o ante Velásquez Quesquén y denunciar que alguien les exigía el pago de coimas para “colaborar” a cambio de ellas.

“CLIMA PARA LA COIMA”
Igualmente, añadió, los brasileños que pagaron las coimas tampoco dieron muestras de haber accedido a ellas forzados o en circunstancias que pudieran ser materia de quejas o denuncias.

Todo ello, dijo, permite suponer que en aquellas reuniones se creó un clima a favor de la coima y que allí pudo tomar forma un esquema de la corrupción, según lo expresado por Tejada

Según David Tejada, existen elementos que dan qué pensar respecto a las relaciones que llegaron a tejer por ejemplo el entonces primer ministro Javier Velásquez Quesquén y los altos directivos de Odebrecht.

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Se refirió a la información del semanario “Hildebrandt en sus Trece”, según la cual un hijo del chiclayano entonces premier y hoy congresista ingresó a trabajar en la empresa brasileña. “Esto, cuando menos, llama la atención”, subrayó Tejada.