La otra coima de Toledo

Habría recibido soborno de US$6 millones de Camargo Correa, según Fiscalía

Indagación del Ministerio Público pone contra la pared a expresidente

La situación de Alejandro Toledo se complica. El ex presidente tendrá que responder ante la Fiscalía no solo por la coima de US$20 millones que Jorge Barata, ex mandamás de Odebrecht en Perú, que asegura haberle pagado, sino también por otros US$6 millones que le habría entregado la constructora brasileña Camargo Correa.

De acuerdo con un informe del semanario Sucesos, citando fuentes del Ministerio Público, en la oficina del fiscal Hamilton Castro “la carpeta 6 es guardada con especial cuidado”.

La carpeta Nº 6 proviene de la Operación Castillo de Arena que fue archivada en Brasil en abril de 2015, pese a las múltiples evidencias. Para las autoridades de la justicia peruana, el documento reviste importancia fundamental y sirve como hilo conductor para desentrañar el laberinto del Lava Jato. 
La Operación Castillo de Arena investigó a la empresa Camargo Correa y las coimas que esta entregó no solo en territorio brasileño, sino también en el Perú y varios países de América Latina.

La fiscalía encargada del caso determinó que en esas páginas figuran indicios de las coimas pagadas por Camargo Correa, en virtud de las cuales se han establecido diversas líneas de investigación.
Una de ellas está vinculada el Tramo IV de la Carretera Interoceánica a cargo de Camargo Correa e involucra al ex presidente Alejandro Toledo.

En la denominada Carpeta Nº 6 se señala que el chakano recibió seis millones de dólares de parte de dicha empresa por la concesión del referido tramo de la Interoceánica Sur.

Ese monto se suma a los 20 millones de dólares que, según Barata, entregó al ex mandatario. De esta manera, serían US$26 millones en coimas los que habría recibido Toledo Manrique, según la investigación del Ministerio Público.

De otro lado, fuentes a cargo de la indagación, señalaron a la revista Sucesos que Toledo se apresuró en salir del país cuando se enteró del acuerdo suscrito con los colaboradores de Odebrecht Perú a inicios de enero.

“Se enteró de la noticia cuando veraneaba en Punta Sal, donde se dio el lujo de pagar una cuenta de doce mil soles por los consumos de un día en el restaurante de un hotel”, señalaron las mismas fuentes.
Advertido del acuerdo de los fiscales peruanos con Barata y compañía, Toledo viajó rápidamente a Lima, donde solo permaneció un día en su casa de la urbanización Camacho. Luego viajó a Estados Unidos.
Poco después, el 4 de febrero los fiscales entraron y allanaron su residencia. Ahí, según las fuentes, encontraron todas las cosas desordenadas, como si se hubiera marchado casi fugando.